San Javier, Misiones – En una reciente entrevista concedida a FM Alto Uruguay, los veterinarios José Manuel “Tete” Silveira e Irina Marisel Cisneros compartieron detalles y reflexiones sobre el ambicioso y sostenido Programa de Castraciones Municipales, que desde 2022 ha logrado evitar que más de 11.100 mascotas terminen en situación de calle, gracias a un enfoque integral que combina atención veterinaria, estadísticas preventivas y, sobre todo, educación a la comunidad.
Durante la charla, los profesionales destacaron la importancia de comprender el comportamiento y necesidades específicas de perros y gatos, haciendo énfasis en que los caninos tienen hábitos diurnos y los felinos nocturnos, lo que explica su aparente independencia. Esta diferenciación ayuda a mejorar la convivencia entre animales y humanos, además de permitir cuidados más adecuados.
Educación, prevención y compromiso social
La veterinaria Irina Marisel Cisneros explicó que el programa de castraciones no solo busca frenar la reproducción indiscriminada, sino también mejorar la salud de las mascotas. “Castrar una perra o una gata puede evitar que cientos de cachorros terminen en situación de abandono”, afirmó. El equipo lleva un registro detallado de cada intervención, diferenciando entre hembras y machos, lo que permite calcular estadísticamente cuántos nacimientos se evitaron.
Por su parte, el Dr. José Manuel Silveira subrayó que el objetivo del programa va más allá de realizar cirugías: “Nos enfocamos en la educación del tenedor responsable. No se trata solo de tener mascotas, sino de cuidarlas adecuadamente. Lo ideal es que cada hogar tenga como máximo dos o tres animales”.
También aclaró un error común: los perros callejeros que reciben alimento, agua o refugio por parte de los vecinos también son considerados mascotas, aunque no vivan puertas adentro. “Todos tenemos alguna responsabilidad con esos animales que rondan nuestros barrios”, remarcó.
Un trabajo territorial y sostenido
El programa ha tenido presencia en todos los barrios de San Javier, incluyendo Niño Jesús, Elvira, Tiro al Blanco y actualmente Barrio Malvinas, donde el equipo estará realizando castraciones y dando turnos todos los martes y jueves. La entrega de turnos se hace de manera presencial, con prioridad a quienes se acerquen en la fecha anunciada, siendo la próxima jornada este viernes a las 15 hs en el salón comunitario.
Gracias a la coordinación con Juana, una colaboradora clave del equipo, se realiza un seguimiento personalizado: se recuerda cada turno, se informan las condiciones del preoperatorio (como el ayuno) y se reprograman casos que no puedan asistir.
En cada visita barrial, además de las castraciones, se brinda vacunación antirrábica, desparasitación y charlas informativas. El municipio cubre todos los gastos, haciendo uso responsable de los recursos públicos, y el personal se encarga también del mantenimiento y puesta en valor de los espacios comunitarios que utilizan.
Rabia y zoonosis: lo que hay que saber
Silveira destacó la importancia de vacunar contra la rabia, enfermedad zoonótica que puede transmitirse a los humanos. “El principal vector es el murciélago, que puede enfermarse, caer en los patios y contagiar tanto a perros como a gatos. A veces, el gato lo caza y hasta lo lleva a la cama como un trofeo”, advirtió.
Las campañas de vacunación son gratuitas, sin turno previo y están dirigidas tanto a animales mestizos como de raza. A partir de los tres meses de edad, cualquier mascota puede recibir su dosis y certificado.
Contra mitos y desinformación
Ambos profesionales también combatieron creencias erróneas, como la idea de que las perras deben tener una camada “al menos una vez”. “Es un mito que causa sufrimiento y abandono. Las camadas no deseadas terminan muchas veces en cajas, en la vía pública”, lamentaron.
También derribaron otros prejuicios, como que los perros castrados pierden su instinto de guardia o de caza. “Castrar no cambia el carácter protector del perro, sí reduce el vagabundeo, las peleas y la marcación con orina”, aseguraron.
En Mojón Grande, el programa también avanza
El mismo proyecto también se implementa en Mojón Grande, con el respaldo del intendente Adrián Solís y el coordinador local Maxi, logrando una amplia convocatoria y aceptación de la comunidad. “El trabajo en territorio da frutos. Ya no se ven tantas manadas de perros siguiendo a una perra en celo. Las perras descansan, engordan, viven mejor. Todo mejora”, afirmaron.
Próximos pasos
El equipo estará presente todo junio y posiblemente hasta noviembre en el barrio Malvinas. Los turnos se otorgan según la demanda, y se prioriza siempre la salud, el bienestar animal y la educación ciudadana.
También anunciaron la incorporación de fumigaciones domiciliarias a pedido, para combatir plagas y vectores de enfermedades como el dengue o la leishmaniasis, una zoonosis grave y presente en la región, especialmente entre los perros.
En conclusión el Programa Municipal de Castraciones no solo mejora la calidad de vida de los animales, sino que también eleva el nivel de conciencia ciudadana, reduce riesgos sanitarios y dignifica el vínculo entre humanos y sus mascotas. Con un enfoque integral, técnico y profundamente humano, San Javier y Mojón Grande se consolidan como referentes en el cuidado animal responsable en la provincia.