jueves, junio 26, 2025

Top 5 Semanal

Relacionadas

El Gobierno reveló cuántos dólares tienen los argentinos bajo el colchón

La cantidad de divisas que se encuentran fuera del sistema financiero local, se volvió a reducir, según estimaciones del INDEC. Los números en detalle

25/06/2025 – 20:27hs


Los dólares que los argentinos tienen fuera del sistema financiero local volvieron a bajar. La disminución ocurre en el medio de la calma cambiaria luego del primer trimestre del año, en el cual continuó con la tendencia exhibida desde el cambio de Gobierno.

Esas divisas están en el país o en el exterior, y pertenecen a argentinos o empresas argentinas que, en su gran mayoría, no están declarados. La noticia se conoció en un contexto en el que el Gobierno busca que esos dólares salgan del colchón, de las cajas de seguridad y del exterior, con su propuesta de que «todo argentino es inocente hasta que ARCA demuestre lo contrario».

¿Cuántos dólares tienen los argentinos bajo el colchón?: INDEC lo reveló

Esto se acentuó en el 2024 por el blanqueo de capitales en efectivo. Al cierre del primer trimestre del año, los argentinos residentes en el país cuentan con u$s259.978 millones por fuera del sistema financiero local, el cual estimó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) en su informe sobre balanza de pagos.

El monto que se encuentra por fuera del sistema financiero local representa una reducción de u$s342 millones, en comparación con lo que poseían en el trimestre anterior. Además, una baja de u$s 12.170 millones en comparación con el mismo trimestre del año pasado, previo al blanqueo de capitales en efectivo que realizó el Gobierno.

La reducción del stock que se registró en el primer trimestre fue moderada, pero mantuvo la tendencia bajista que viene mostrando desde el cambio de Gobierno. Previo al cambio de administración, la estimación del organismo oficial de estadística mostraba incrementos en cada uno de los informes trimestrales.

La tendencia bajista en la tenencia de divisas por fuera del sistema financiero resalta, junto a otros datos y variables de la economía, la mejora en los niveles de confianza por parte de los inversores, ahorristas y familias, ya que, en momentos de mayor incertidumbre y tensiones la cifra suele incrementarse, como se observó anteriormente.

Desinflación y tasas reales positivas: el nuevo eje de la estrategia económica

La caída de la inflación fue uno de los logros más visibles del programa económico desde la llegada de Javier Milei al poder. Con un IPC que avanzó apenas 1,5% en mayo —el menor registro mensual desde 2017— el Gobierno consolidó una tendencia desinflacionaria que permitió fortalecer la estabilidad financiera.

Este proceso se dio en paralelo a una estrategia de tasas altas y fuerte contracción monetaria. La meta: absorber liquidez, evitar presiones sobre el dólar y consolidar el esquema de rendimientos en pesos. En este marco, los plazos fijos y los bonos indexados comenzaron a ofrecer retornos reales positivos, un fenómeno inédito en casi dos décadas de sistema financiero argentino.

Según la consultora Invecq, esta estrategia operó con una lógica clara: restringir la emisión monetaria, aumentar los encajes bancarios y dejar que el mercado fije las tasas. Esto dio lugar a un escenario en el que las decisiones de inversión volvieron a analizarse en función de retornos reales, y no solo como cobertura cambiaria.

Crédito caro, inversión contenida: los efectos colaterales de la política monetaria

Sin embargo, este reordenamiento tuvo también costos evidentes. La política de tasas altas limitó el acceso al financiamiento tanto para consumidores como para empresas. El crédito al consumo se contrajo y la inversión productiva quedó postergada ante el encarecimiento del capital.

La tasa nominal anual de los préstamos personales ronda el 75%, mientras que los adelantos a empresas están cerca del 37%. En un escenario donde la inflación proyectada para los próximos 12 meses se ubica en torno al 20%, estas tasas implican un costo real de endeudamiento excesivamente alto.

Los expertos advirtieron que esta situación genera una tensión estructural: mientras la estabilidad nominal se consolida, la actividad económica corre el riesgo de estancarse. La caída del consumo, el freno a la inversión privada y el aumento de la morosidad bancaria son síntomas de un sistema financiero que prioriza el anclaje inflacionario sobre la reactivación.